Existen dos clasificaciones de democracia: representativa o participativa.
La democracia representativa es cuando gobiernan personas elegidas por el voto para que representen la voluntad popular del pueblo.
La democracia participativa es cuando se aplica un modelo político que permita a los ciudadanos ejercer una influencia directa en las decisiones públicas. Que pueden ser excluyentes y suelen integrarse como mecanismos complementarios.
En Argentina tenemos una democracia que es representativa y participativa, aunque algunos les pese, sin proscripciones ni desigualdad política.
Pero esta democracia está basada en el clientelismo. Y no solo se lo debemos asociar al Justicialismo.
Hoy en día muchos partidos políticos encuentran en el clientelismo una forma efectiva para recoger más votos a la hora de las elecciones.
Por un lado la política ha ido creciendo en algunos niveles: mas información, mas comunicación y mas educación, pero por el otro lado hay una crisis institucional no solo en Argentina sino en también en toda América Latina.
Los partidos políticos también sufren estas crisis; y se debe a las asociaciones que sustituyen a los partidos políticos. Llámese Alianzas, Coalición, etc.
Los partidos políticos tienen un enfoque general del funcionamiento del país, mientras que las asociaciones partidarias son sectoriales y corporativas, pero son las que más se desarrollan porque defienden intereses particulares, generalmente en contra de algo, pero no se los puede llamar partido político.
Por ejemplo, en el 2001 personas de diferentes ideologías políticas se convocaron para manifestarse en contra del corralito promoviendo los cacerolazos; o los piqueteros que nunca llegaron a constituir un partido político porque defendían sus propios intereses.
Y cuando esas asociaciones defienden a un sólo sector y no representa ningún interés en un programa de gobierno, no pueden llegar a ningún lado. No pueden tener futuro por las diferencias propias e individualistas.
El individualismo, a veces tribal, es la causa de deterioro de los partidos. Sobre todo aquellos que no pudieron superar el trauma de las dictaduras represivas y terroristas.
Hubo en nuestro país, una época de una cultura del enfrentamiento que aun hoy existe y despolitiza.
En la dictadura, Las Fuerzas Armadas a favor de algunos sectores también despolitizó bastante, y llevó a la crisis de los partidos. Sino dónde quedó el radicalismo o el PDC entre otros.
El Partido Justicialista es un fiel reflejo de la desintegración del Movimiento Peronista cuyo líder murió hace 34 años y su base tiene mas de 50 años. Esa desintegración es producto de las peleas de varios políticos por su liderazgo y han terminado disgregando el sentimiento Peronista.
En la historia Argentina hubo un héroe que cambió la vida social del país, Juan Domingo Perón, líder nato por naturaleza que muchos intentaron imitar. Otro grave error de muchos políticos. Los líderes no se pueden igualar. Se es líder o no se es y la esencia está en el carisma y en sus valores, no en las imitaciones.
Nada que no sea genuino puede tener futuro.
A mi entender, el Parido Justicialista ha llegado a su fin como partido. No hay un líder, se desvirtuó su doctrina, no existen cuadros, la justicia social se convirtió en clientelismo. Si Perón vivera...
El mundo se cae a pedazos por la falta de dirigentes serios y no se ve que nadie intente lo contrario. El no te metas sigue tan vigente que nos arrastra al caos mundial.
Es descabellado lo que digo?? Ojalá me equivoque, pero no debo estar tan errada.
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